RINCÓN DE LUZ
Maruca Rodini
Argentina
Con
una brillante luz, vi un túnel profundo cubierto con flores, entre la niebla
parecían nubes transparentes.
En
ese instante, sentí una sensación de paz y tranquilidad. A lo lejos, vi aparecer entre el sueño, una
figura hermosa que alcance divisar. Era un Ángel, que vino hacia mí.
Y
me dijo. ¡No llores!....Nosotros estamos bien aquí, reunidos en el cielo, con
todos los ángeles. ¡También está tu hijo!...Tú no sabes lo contento que se
siente.
Sólo
se entristece cuando se apaga su vela. ¡ Es por eso, no debes llorar!. Porqué
tus lágrimas, no deja que él tenga la luz necesaria para ver..
Él
es feliz aquí en el cielo, somos una gran familia, cantamos en coro, el cantico
de los ángeles, la plenitud de amor.
¿Tú
sabes?. Algún día, todos nos reuniremos aquí, en éste mismo lugar.
Eso
será cuando Dios lo disponga.
Sé
que no puedes verme, pero estoy contigo, desde el amanecer, hasta el otro día,
siempre estoy a tu lado, velando por ti, en todo lo que haces.
¡
No estés triste!. Yo te cuido y te protejo. Soy el Ángel de luz, reflejo de
amor…..
Así
fue cuando me moví en la cama, y me pareció verlo entre la neblina, correteando
por las cimas, envolviendo ese sueño que sentí tanta alegría y felicidad.
También una gran protección.
Le
entregaré mis lágrimas, para que se conviertan en perlas. Dejaré mis tristezas.
Sé
que llevaras mi mensaje al cielo, de cuanto ¡lo quiero!....
Al
despertar, me levanté rápido. Abrí la puerta, para dejarlo entrar.
Fue
imposible. Sólo fue un sueño…Desde ahora no voy a volver a llorar!
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